Desde tiempos remotos, Italia es territorio vinícola. A nivel mundial este país es famoso y reconocido como uno de los más grandes e importantes productores de vino. Fueron los primeros en fabricarlo en la historia y poseen una inmensa pasión por la cultura de la vid, lo que se manifiesta en la gran variedad de vinos con personalidad propia que se crean en cada región italiana.
En la antigüedad, esta extensión territorial fue llamada por los griegos con el nombre de “Enotria”, que significa “tierra de vino”, tal término está relacionado con los enotri, los cuales fueron habitantes de lo que es actualmente la Basilicata y que desde el año 500 a.C. ya realizaban prácticas de viticultura, vinificación y la conservación del vino.
Regiones productoras de vino en Italia
Cada una de las regiones vinílicas en Italia tiene sus especialidades. El país cuenta con más de 200 zonas oficiales en producción vinícola y casi 2 millones de productores. Esto podría hacer creer que en cada parcela se cultiva uva para vino.
En la nación se elaboran todos los estilos de vino, incluyendo los espumosos y licorosos, esto gracias a la inmensa diversidad que poseen de microclimas y emplazamientos capacitados para cultivos de la cepa.
Apulia –o Puglia- es la región donde se produce más vino en el país. Pero la lista de regiones importantes en producción de vino es larga. Piamonte, Toscana y Veneto destacan por su creación de vinos de gran calidad, sin embargo otras zonas también son recalcables, como Liguria, Valle de Aosta, Friul, Tentino, Lombardía, Emilia Romaña, Alto Adigio, las Islas de Sicilia y Cerdeña. Más de 200 Denominazione de Origini Controllata (D.O.C) son producidas en los territorios.
Clasificación y denominación
En el año 1963, el gobierno de Italia estableció un sistema de denominación de origen del vino basado en el sistema de Francia de A.O.C (Appellation d’Origine Contrôlée). La versión italiana se llama Denominazione de Origini Crontrollata con las siglas D.O.C.
En la actualidad el sistema mantiene cuatro clasificaciones ordenadas en una pirámide desde el mejor al más básico.
1-D.O.C.G (Denominación de Origen Controlada y Garantizada): esta es la mayor calidad lograda. Mantienen prestigio nacional e internacionalmente. Sus controles en la producción y embotellamiento son más rigurosos.
2-D.O.C (Denominación de Origen Controlada): se trata de los vinos producidos en una zona pequeña o delimitada, los cuales siempre llevan el nombre geográfico. Antes de que el producto llegue al consumidor pasa por análisis químico y sensorial.
3-I.G.T (Indicación Geográfica Típica): son característicos por venir de una zona geográfica específica. La identificación de su variedad es un elemento secundario. Se trata de la versión italiana de los Vins de Pays de Francia o del Vino de la Tierra de España. Las zonas en las que se producen normalmente grandes. Su reglamento de producción no es tan estricto. Los vinos I.G.T no pueden usar los nombres de zonas o regiones ya utilizados por los D.O.C.G o los D.O.C.
4-Vino de Tavola (vino de mesa): se refiere a la clasificación más básica y solo se pueden identificar con el nombre de la bodega o del vino. En su etiqueta no puede aparecer información sobre variedad, región de procedencia o añada. Aveces no significa baj calidad sino rechazo a reglamentos o normas de las anteriores denominaciones.
Varietal de vinos
Entre la gran variedad de vinos producidos en tierra italiana se destacan las tintas: de Barbera (propias de zonas como Astia o Cuneo), Dolcetto (propias de Piamonte, que da vino de igual nombre), Montepulciano (de entre las zonas de Puglia y Emilia Romaña), Nebbiolo (viña habitual de Piamonte) y Sangiovese (su origen data en la Toscana, pero actualmente se encuentra desde Piamonte a la Campania). Y los blancos: Cortese (usadas en Piamonte), Trebbiano (su origen está en la Toscana) y Vernaccia (sus vinos maduran bajo velo, al igual que los tipo jerez).
Nos encontramos ante un país de tradición vinícola sin igual, con productos de la más alta calidad con reconocimiento mundial. Conocer en concreto sus diversidades de vinos es todo un desafío y a la vez un placer para los aficionados. La combinación de características climáticas, históricas y geográficas han dado pie a una variedad de viñas únicas en el mundo.